Científicos del MIT (Massachusetts Institute of Technology) han descubierto que las células endoteliales (endotelios), que recubren los vasos sanguíneos, secretan moléculas que suprime el crecimiento de tumores y evita que el cáncer contamine otros tejidos, un descubrimiento que podría conducir a nuevos tratamientos contra el cáncer.

Elazer Edelman, profesor en MIT-Harvard Division of Health Sciences and Technology, indicó que el implante de este tipo de células cercanas al tumor del paciente podría ayudar a combatirlo y prevenir que crezca de nuevo o que invada otras áreas después de una cirugía o quimioterapia. Edelman ha ya probado este tipo de implantes en ratones, y el MIT ha vendido la licencia de uso de esta tecnología a Pervasis Therapeutics, para prueba en humanos.

Células endoteliales insertadas en una base de colágeno

Células endoteliales insertadas en una base de colágeno

El estudio fue publicado el 19 de enero en la revista Science Translational Medicine, como “un cambio de paradigma” que podría modificar de manera fundamental la forma como se entiende el cáncer y su tratamiento. “Esta es una terapia contra el cáncer que podría usarse por sí misma o combinada con quimioterapia o cirugía, pero sin incorporar ningún efecto adverso”, indicó Eldeman.

Se pensaba que las células que recubren los vasos sanguíneos, conocidas como células endoteliales, servían fundamentalmente como puertas estructurales que regulaban la sangre de y hacia los tejidos. Sin embargo, se sabe que son mucho más activas. En los años 80s, los científicos descubrieron que las células endoteliales controlan la constricción y dilatación de los vasos sanguíneos, y en los 90s, Edelman, entre otros, descubrieron un rol aún más importante para las células endoteliales: regulan la coagulación de la sangre, reparación de tejido, inflamación y  cicatrización por medio de liberar moléculas conocidas como citokines (pequeñas moléculas que llevan mensajes entre las células) y proteínas complejas de azúcar.

Muchas enfermedades vasculares, entre ellas la arteriosclerosis, se originan en las células endoteliales. Por ejemplo, cuando un vaso sanguíneo es dañado por el colesterol, azúcar alta, o estimulo físico,las células endoteliales pueden sobre reaccionar y provocar inflamación descontrolada, que puede posteriormente dañar el tejido que la rodea.

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