Nuestro origen muy bien podría ser marciano, dice geoquímico

Es muy posible que la vida haya llegado a la Tierra en un meteorito marciano; las condiciones apropiadas para la vida podrían aún existir en Marte.

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Ha surgido nueva evidencia que apoya la largamente debatida teoría que la vida en la Tierra podría haber iniciado en Marte.

En su participación el jueves pasado en la Conferencia Anual Goldschmidt, el profesor Steven Benner del Instituto de Ciencia y Tecnología Westheimer dijo a los geoquímicos participantes que una forma oxidada de mineral del elemento molibdeno, el cual podría ser crucial para el origen de la vida, podría haber estado disponible en la superficie del planeta Marte pero no en la Tierra.

“Adicionalmente, estudios recientes muestran que estas condiciones, apropiadas para el origen de la vida, podrían aún existir en Marte”, añadió.

“Es sólo cuando el molibdeno deviene altamente oxidado que es posible que influencie la formación de la vida temprana”, dijo Berner. “Esta forma de molibdeno no pudo estar disponible aquí en la Tierra en el momento en que la vida inició, ya que hace tres mil millones de años la superficie terrestre tenía muy poco oxígeno, pero Marte sí lo tenía. Esta es otra pieza de evidencia que apoya el hecho que la vida llegó a la Tierra en un meteorito marciano, en lugar de haber iniciado aquí mismo”.

Paradojas

Benner abordó dos de las cuatro paradojas que hacen especialmente difícil para los científicos comprender como la vida inició en la Tierra.

La Paradoja Alquitrán: moléculas orgánicas, dadas cierta energía y abandonadas por sí mismas, evolucionan en mezclas complejas, “asfaltos”, mejor dotados para pavimentar carreteras que para la evolución darwiniana. Cualquier escenario para el origen de la vida requiere una manera para que el material orgánica escape hacia la existencia darwiniana, donde se existe la replicación con imperfecciones, donde las imperfecciones mismas son hereditarias y permiten una selección natural que evita un destino alquitranado.

La Paradoja del Agua: se cree comúnmente que el agua es esencial para la vida. Y así se consideran los biopolímeros como el ARN, ADN y las proteínas. Sin embargo, los biopolímeros que conocemos encuentran que el agua es corrosiva para ellos. Cualquier escenario en los orígenes debe lidiar con la aparente necesidad de la vida de una substancia, el agua, que es inherentemente tóxica para la vida misma.

“La evidencia parece indicar que todos somos marcianos; la vida inició en Marte y llegó a la Tierra en un meteorito o roca”, dijo el profesor Benner. “Sin embargo, es una suerte que nos encontremos aquí, ya que la Tierra ha sido el planeta mejor dotado para la vida de los dos. Si nuestro hipotético ancestro marciano hubiera permanecido en Marte, seguramente no tendríamos una historia que contar hoy”.

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