Agua en la luna: ha estado allí desde siempre

Se ha detectado rastros de agua dentro de la estructura cristalina de muestras de mineral obtenidos de las zonas altas durante las misiones Apolo, de acuerdo a un equipo de la Universidad de Michigan.

Esta muestra lunar se conoce como "Roca del Genésis", es una muestra lunar del Apolo 15, y se considera parte de la corteza original de la Luna. La investigación de la Universidad de Michigan encontró rastros de agua en la roca. (Crédito: NASA/Johnson Space Center)

Esta muestra lunar se conoce como “Roca del Genésis”, es una muestra lunar del Apolo 15, y se considera parte de la corteza original de la Luna. La investigación de la Universidad de Michigan encontró rastros de agua en la roca. (Crédito: NASA/Johnson Space Center)

Se considera que las zonas altas de la luna representan la corteza original cristalizada del magna lunar en sus primeras etapas de formación. El nuevo descubrimiento indica que la luna en sus primeras fases era húmeda y que el agua no se perdió de manera definitiva durante su formación.

Este resultado parece contradecir la teoría predominante de formación de la luna –que la luna se formó de los restos de un gran impacto entre la Tierra y otro cuerpo planetario de un tamaño aproximado a Marte, de acuerdo con Youxue Zhang.

En los últimos cinco años, observaciones espaciales y nuevas mediciones en laboratorio de las muestras lunares han dejado sin fundamento la idea largamente sostenida que la luna es completamente árida.

En el 2008, mediciones de las muestras lunares del Apolo por medio de microsondas iónicas detectó hidrógeno, y puede inferirse que corresponde a grupos de hidroxilo, relacionados con el agua en los cristales volcánicos lunares. En el 2009, el satélite de la NASA Lunar Crater Observation and Sensing, conocido como LCROSS, se estrelló contra un cráter lunar y su explosión mostró una gran cantidad de material sorprendentemente abundante en agua.

Los hidroxilos también han sido detectados en otras rocas volcánicas y en el regolito lunar, la capa de polvo fino y fragmentos de roca que cubre la superficie lunar. Los hidroxilos, que consisten de un átomo de hidrógeno y uno de oxígeno, han sido también detectados en la anortosita lunar, reportó un estudio en Nature Geoscience.

En el estudio más reciente, se utilizó espectroscopia Fourier infrarroja transformada para analizar el agua contenida en granos de provenientes de la anortosita lunar y rocas de zonas altas compuestas en más del 90 por ciento de plagioclasa. Se cree que las rocas de colores brillantes de las zonas altas se formaron en la historia temprana de la luna, cuando la plagioclasa se cristalizó a partir del océano de magma y flotó en la superficie.

La investigación de espectroscopia infrarroja, realizada por Zhang y Anne Hui Peslier detectó 6 partes por millón de agua en la anortosita lunar.

“El sorprendente descubrimiento de esta investigación es que en rocas lunares, incluso en minerales nominalmente sin agua tales como el plagioclasa feldespato, puede detectarse agua”, indicó Zhang.

“No es agua ‘líquida’ la que se ha medido en estos estudios, sino grupos de hidroxilo distribuidos dentro del mineral. También hemos detectado hidroxilo en la estructura cristalina de las muestras del Apolo”.

Los grupos de hidroxilo son evidencia que el interior lunar contenía agua en cantidad considerable durante el estado inicial lunar, antes de solidificarse, y puede haber jugado un papel considerable en el desarrollo del basalto lunar. “La presencia de agua”, dice Hui, “podría implicar una solidificación más prolongada del magma lunar que el popular anhidro escenario lunar”.

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