Investigadores del MIT han dado un paso hacia adelante en replicar la complejidad de un órgano al hacer crecer distintos tipos de células en el orden correcto.

Bloque celular. Células madre encapsuladas en dos materiales distintos, gelatina el de la izquierda, polietileno glicol en la derecha.

Bloque celular. Células madre encapsuladas en dos materiales distintos, gelatina el de la izquierda, polietileno glicol en la derecha.

Los científicos colocaron células madre embriónicas en “bloques de construcción” con un gel que motiva a las células a convertirse en determinado tipo de célula. Estos bloques de construcción pueden colocarse juntos para elaborar estructuras complejas. El gel se degrada y desaparece conforme el tejido crece.

El grupo espera, eventualmente, poder elaborar el tejido cardiaco al colocar bloques de células que se conviertan en músculo junto con otros bloques que generen vasos sanguíneos.

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