Investigadores de la Universidad de Granada han desarrollado un ‘cerebelo artificial’ que controla un brazo robótico con precisión similar a la humana.

Proyección de circuitería biológica de bucles de control recurrentes en microcircuitos inspirados biológicamente. (Crédito: N. R. Luque, J. A. Garrido, R. R. Carrillo, S. Tolu, E. Ros/International Journal of Neural Systems)

Proyección de circuitería biológica de bucles de control recurrentes en microcircuitos inspirados biológicamente. (Crédito: N. R. Luque, J. A. Garrido, R. R. Carrillo, S. Tolu, E. Ros/International Journal of Neural Systems)

El cerebelo es la parte del cerebro humano que controla y coordina los movimientos del cuerpo.

Los robots actuales requieren por lo general mucha fuerza y consumen mucha energía. Esta característica no es compatible con los humanos ya que cualquier mal funcionamiento es potencialmente peligroso.

Para resolver este problema, investigadores de la Universidad de Granada han implementado un microcircuito biológicamente inspirado basado en un nuevo modelo del cerebelo que se adapta a correcciones y almacena efectos sensoriales.

El cerebelo artificial incluso graba comandos motores para predecir la acción o movimiento que se ejecutará por el brazo robótico.

Las arquitecturas inspiradas biológicamente usadas en este modelo combinan el manejo de error con control adaptable predictivo. El robot ejecuta aprendizaje automático y dos sistemas de control llevan un control exacto y robusto del brazo robótico durante el manejo de objetos.

La cooperación entre el cerebelo artificial y el sistema de control automático permite al robot adaptarse a condiciones cambiantes así como interactuar con humanos.

Más información sobre este artículo lo encuentras aquí.

Palabras más populares:

  • cerebelo