Almacenamiento y recuperación de dos imágenes. (a) La intensidad espacialmente integrada de la recuperación de una sola letra T (azul), y N (rojo). La curva amarilla muestra el almacenamiento de dos imágenes, y las curvas se desplazan verticalmente para efectos de claridad. (b) La  línea de tiempo a detalle de la recuperación de las imágenes en 7 frames. (Crédito: Quentin Glorieux, Jeremy B. Clark, Alberto M. Marino, Zhifan Zhou, Paul D. Lett)

Almacenamiento y recuperación de dos imágenes. (a) La intensidad espacialmente integrada de la recuperación de una sola letra T (azul), y N (rojo). La curva amarilla muestra el almacenamiento de dos imágenes, y las curvas se desplazan verticalmente para efectos de claridad. (b) La línea de tiempo a detalle de la recuperación de las imágenes en 7 frames. (Crédito: Quentin Glorieux, Jeremy B. Clark, Alberto M. Marino, Zhifan Zhou, Paul D. Lett)

Un grupo de científicos ha almacenado una imagen única en una nube de átomos de rubidio por varios años. Ahora, han dado un paso más al almacenar dos imágenes al mismo tiempo, reportó el blog Technology Review Physics arXiv.

Una de las tecnologías que permitiría el desarrollo de una internet cuántica es la capacidad de almacenar y recuperar información cuántica de forma confiable y repetidamente.

Una forma de lograr este objetivo es mediante fotones y pequeñas nubes de gas rubidio. Los átomos de rubidio tienen una propiedad interesante: un campo magnético causa que se dividan sus niveles de energía electrónica, creando varios niveles de nuevas frecuencias.

Al apagar el campo magnético, los átomos regresan a su estado normal inicial y ocasiona que emitan fotones, permitiendo así que la información almacenada pueda ser recuperada.

Este proceso sugiere inmediatamente una forma de construir una memoria cuántica: guardar una imagen completa, enviarla a la nube de gas por medio de colocar una máscara de la imagen en el rayo de fotones.

El almacenamiento dura alrededor de 10 milisegundos y la imagen puede recuperarse con exactitudes que se aproximan al 90 por ciento. (La duración del almacenamiento está limitada por el movimiento de los átomos en el gas lo que ocasiona imágenes borrosas conforme pase el tiempo).

Recientemente, investigadores del National Institute of Standards and Technology han almacenado dos imágenes, una de la letra T y otra de la letra N, en memoria gradiente (gradient echo memory GEM) dentro de vapor atómico. La secuencia que se muestra en la imagen aquí muestra como se recuperan las imágenes directamente del gas, en grabación realizada con cámara de alta velocidad en frames de 100 nanosegundos.

“Hemos demostrado que varias imágenes pueden almacenarse y recuperadas en tiempos distintos, lo que permite el almacenamiento de una película corta en una memoria atómica”, indicaron los investigadores.

Hasta ahora, las secuencias de imágenes únicamente habían sido almacenadas al mismo tiempo en dispositivos de estado sólido, tales como memorias holográficas. Esta nueva técnica parece tener un potencial asombroso para dispositivos de memoria cuántica.

Puedes leer el artículo completo en inglés aquí.

Puedes leer el estudio completo en inglés aquí.